'Mapas de los sonidos de Tokyo' de Coixet, a Cannes


Pedro Almodóvar e Isabel Coixet —entre Quentin Tarantino, Jane Campion, Lars von Trier, Michael Haneke, Marco Bellochio, Ang Lee y Ken Loach, entre los 52 seleccionados de un total de 1.670 presentados— disputarán la Palma de Oro en la edición 2009 del Festival de Cannes, que se celebrará del 13 al 25 de mayo. Por otro lado, Alejandro Amenábar irá con su superproducción Ágora, también en la sección oficial pero fuera de concurso. Conozcamos algo más sobre los Mapas de los sonidos de Tokyo de Mrs Coixet, protagonizada por Sergi López y Rinko Kikuchi, sobre cuyo rodaje ha elaborado un videoblog.

Ryu es una chica solitaria de aspecto frágil que contrasta con la doble vida que lleva: de noche trabaja en una lonja de pescado en Tokyo y esporádicamente recibe encargos como asesina a sueldo. El señor Nagara es un poderoso empresario que llora la muerte de su hija Midori que se ha suicidado, y culpa del suicidio a David, un hombre de origen español que posee un negocio de vinos en Tokyo. Ishida, un empleado del señor Nagara que amaba a Midori en silencio contrata a Ryu para que asesine a David… Un ingeniero de sonido, obsesionado con los sonidos de la ciudad japonesa y fascinado por Ryu es el mudo testigo de esta historia de amor que se adentra en las sombras de alma humana allá donde solo el silencio es elocuente.



"Las películas, como las melodías o los poemas nacen de extraños encuentros, de asociaciones a menudo incongruentes pero siempre mágicas. En el caso de Mapa de los sonidos de Tokyo, la historia se me apareció (no quiero sonar como una iluminada, pero no se me ocurre mejor forma de expresarlo) en el mercado de pescado de Tsukiji en Tokyo. Imagino que el olor de atún fresco y algas y ostras, los gritos de los subasteros, el fragor de los miles de cajas siendo arrastradas y la peculiar luz de los fluorescentes a las cuatro de la mañana, tuvieron mucho que ver. O quizás tuvo que ver, el desayuno de sopa de miso y makis de anguila. O el rostro pétreo de una chica, que manejaba con destreza una manguera y que se negó enérgicamente, con una decisión poco habitual en Japón, a ser fotografiada por mí.
Pero, recuerdo que, en el metro, lleno a rebosar, volviendo soñolienta al hotel, después de haberme levantado a las tres de la mañana para ver la subasta de pescado, no dejaba de pensar en esa chica y en el porqué de su negativa. Pensaba en sus botas de agua chapoteando entre el hielo deshecho y la sangre de los atunes recién cortados. Y al cerrar los ojos y oír la voz casi infantil de la locutora que anunciaba la próxima parada en la estación de Shinjuku, supe que iba a contar la historia de una mujer con una doble vida: una mujer dura, solitaria, misteriosa,
herida. Que trabaja en el Mercado del pescado, limpiando y cargando cajas y recibe esporádicamente encargos como asesina a sueldo. Y la de un hombre, obsesionado por los sonidos, que ama en silencio a esa mujer, aún sabiendo que todo lo que va a obtener de ella es el sonido de su respiración, el ruido de sus tacones en un callejón solitario y sus conversaciones y encuentros con un hombre de origen español, por el que ella siente una atracción que pone en cuestión la vida solitaria que ha llevado hasta entonces.
A esta idea inicial (iluminación o como quieran llamarla) se unió la trama de un hombre que no puede resistir la pérdida de su hija y que busca ciegamente una venganza que se revelará trágica. Así nació Mapa de los sonidos de Tokyo. También de mi fascinación por la cultura japonesa contemporánea, por la atmósfera de las novelas de Haruki Murakami y Banana Yoshimoto, por mi confesa adicción al wasabi y por la vibración casi material que emite la ciudad de Tokyo durante la noche: una mezcla de expectación, misterio, sombra y dulzura que deja una huella imborrable".



La película es una producción de Mediapro y tiene como protagonistas a Sergi López y Rinko Kikuchi, nominada al Oscar a la actriz de reparto por Babel. Mapa de los sonidos de Tokyo se rodó, a lo largo de seis semanas, entre Japón y algunas localizaciones de Barcelona. El japonés y el inglés han sido los dos idiomas en los que se ha rodado este film que refleja la fascinación de Coixet por la cultura contemporánea japonesa. Coixet ya participó en 2006 en otra sección del Festival, Una Cierta Mirada con París, je t’aime, compendio de 18 cortos de los cuales ella dirigió Bastille.