Juan Echanove o la honesta contundencia del actor


Cuando en su momento vi la estupenda ‘Tiempo de silencio’ (Vicente Aranda, 1986) —adaptación al cine de la novela de Luis Martín Santos, con un reparto de lujo—, destacaba con creces la contundencia de Matías, personaje interpretado por Juan Echanove que, lo que son las cosas, ya iniciaba periplo artístico con su compañero televisivo Imanol Arias. Desde sus comienzos Echanove ha sabido incorporar a sus protagonistas un plus de alteridad —ea de entrega y vaciamiento, ea de hiperrealidad—, provocando más verdad a la escena y más notoriedad a la experiencia y recuerdo.

Un actor de coherencia con la palabra, magnífico como pocos en los enunciados del gesto y de la voz, con Juan su timbre delata sentimiento y acción, se mueve, provoca, fluye, actúa coherente en su propuesta, limpia y versátil del papel que toca vivir, ese que llama a la puerta del estado del alma. Así queda su cine con Almodóvar, García Sánchez, Colomo o Díaz Yanes.

Un actor de mirada profunda, esa que completa discurso con el espectador implicado, como hacía Hitchcock, ya sea en la ironía ambigua de la comedia, ya en el fino hilo de la tragedia. Disfrutando ‘Desaparecer’ junto a Bieito y Makovski, estamos ante otro Echanove superlativo: cuánta belleza y cuánta locura junta, cuánta sabiduría y, sobre todo, cuánto actor. Contundente, porque es generoso con el oficio y el público, algo que sólo se logra con talento y trabajo, pero sobre todo, con honestidad. Gracias Juan por tantas dosis de honestidad en cada uno de tus papeles. La ficción se encuentra en deuda contigo. / Carlos Gurpegui

Texto Homenaje para Catálogo. Juan Echanove recibirá el Premio Tarazona y El Moncayo el próximo 23 de agosto de 2014 en el Teatro de las Bellas Artes, en compañía de los también galardonados Eduardo Noriega, Karra Elejalde y Megan Montaner. Más información en http://www.cinetarazonaymoncayo.es