San Sebastián elige a Richard Brooks









Richard Brooks. Entre todas sus joyas, para mí siempre será el autor de Los profesionales (1966), maravilloso western por el que fue nominado al Oscar a mejor guión y dirección, en una década donde el género comenzaba su declive, una parábola sobre el grupo y la aventura protagonizada por Burt Lancaster, Lee Marvin, Claudia Cardinale, Robert Ryan, Jack Palance, Woody Strode y Ralph Bellamy. Ahí es nada.

El 57 certamen donostiarra se acercará a Richard Brooks (Filadelfia, 1912 - Beverly Hills, 1992), director de algunos de los más míticos títulos del Hollywood clásico, como La gata sobre el tejado de zinc (1958) o Dulce pájaro de juventud (1962).
Brooks también fue un incisivo analista de la política y la sociedad americana de su tiempo, con películas que marcaron un hito en la denuncia del racismo y los problemas de la educación como Semilla de maldad (1955) o reflejaron la incidencia del periodismo como cuarto poder en Deadline U.S.A. (1952).
Encuadrado en la llamada generación de la violencia que integraron cineastas como Samuel Fuller, Robert Aldrich, Nicholas Ray, Richard Fleischer y Don Siegel, Richard Brooks marcó su propio camino en el cine que realizó entre 1950 y 1985, aunque "a menudo se le ha negado el prestigio como autor del que sí gozaron sus compañeros de generación", señaló el certamen. En su filmografía figuran algunas de las mejores adaptaciones literarias al cine entre las que se cuentan Truman Capote en A sangre fría (1967), Tenessee Williams en La gata sobre el tejado de zinc (1958), Joseph Conrad en Lord Jim (1965), Fedor Dostoievsky en Los hermanos Karamazov (1958), o Francis Scott Fitzgerald en La última vez que vi París (1954).
Brooks, además, extrajo algunas de las mejores interpretaciones de actores como Paul Newman, Elizabeth Taylor, Humphrey Bogart, Burt Lancaster, Peter O'Toole, Gene Hackman, Lee Marvin, Glenn Ford o Jean Simmons (con la que estuvo casado entre 1960 y 1977) y dio sus primeros papeles importantes a Sidney Poitier en Semilla de maldad (1955) y Richard Gere en Buscando al señor Goodbar (1977). Ganador de un Oscar al mejor guión original por Elmer Gantry (El fuego y la palabra, 1960) y nominado en tres ocasiones como director, Richard Brooks se inició como guionista de emblemáticos films del cine negro de los años 40, como Cayo Largo (John Huston, 1948). Además escribió el guión de casi todos sus filmes como director, con el periodismo y la literatura como base.